Postales del Oraculo
Creado el 18 enero, 2020
En el ascensor,
voy subiendo,
el tiempo y la velocidad se detienen,
la materia de lo que veo se convierte en otra cosa,
la realidad se desintegra,
entonces el ascensor rompe los techos
y se sigue elevando por los cielos
y me veo a mí misma llegando hasta la misma atmósfera
y desde ahí caer con la mirada clavada en mis propios ojos
ya desorbitados o congelados en el espacio exterior,
respirar y pensar que puedo volver al mismo tiempo
son las claves de la supervivencia.
Hasta que aterrizo en mi propio piso,
en ésta secuencia que me ha dejado el mundo. -“cómo un dato pequeño”.-